Transmorucha 2013, ¡un placer en BTT con alforjas! ¡Y buenos amigos!

Foto de grupo de Roberto.

La atracción transmoruchera, ésa que llevaba extraviada en la inmensidad del Universo betetero casi un año, volvió a aflorar con fuerza... Y de la mano de varias cabras locas sobre burras mecánicas ataviadas con alforjas repletas de diversos aperos para la supervivencia, volvimos a dar, un año más y ya van once, comienzo a la magnánima Transmorucha, esa aventura que todos los años nos traslada desde Aldeadávila de la Ribera a Peñaranda de Bracamonte en bicicleta todo terreno, con alforjas, por caminos, senderos o veredas, pasando por diversos parques naturales de la provincia salmantina y con paradas obligatorias en diversos pueblos del camino para tomar una cerveza, o dos, si son pequeñas.




El jueves, 30 de mayo, a las 16 horas y después de juntarnos un buen número de transmoruchos en Aldeadávila, dábamos el pistoletazo de salida a la edición Transmorucha 2013. Este año hemos batido récord de participación, habiendo llegado prácticamente a 60 participantes, con transmoruchos venidos de varias provincias de Castilla y León (Salamanca, Palencia, Valladolid, Zamora), Madrid, Toledo, Asturias, Cantabria y Extremadura, y nuestro querido transmorucho internacional desde Munich (Alemania).
Antes de partir cumplimos con la tradición de comer el bocata entorno a la casa de Elías, cargar a los transmoruchines novatos con la correspondiente botella de sangre de toro de Arribes «Virutín» y templar las riendas para que los nervios no desquiciaran a más de uno que tenía prisa por partir, esos nervios que a más de uno habían mantenido en vela la noche anterior.



Después de solucionar las vicisitudes que surgieron en forma de primeras averías, nos sentamos en los sillines que iban a ser nuestros compañeros de viaje durante los cuatro próximos días, esos asientos que lejos de ser una cómoda poltrona con alcurnia de placentero trono pasarían a ser un reiterativo martillo pilón sobre nuestros glúteos y partimos por nuestro camino, ese que cada año Elías nos varía un poco y que nos lleva desde los profundos cañones tallados por el Duero en el corazón de las Arribes hasta las dehesas de encinas en el campo de Villares de Yeltes. Una bonita tarde para ir haciéndonos al peso de las alforjas, conocer a los nuevos compañeros de viaje y disfrutar de los paisajes primaverales.
Parada y fonda en el Bar Pedro, donde se incorporan nuevos transmoruchos... Buen rollo, ¡y la burra está atendida!



Después de dormir lo justo junto al Río Yeltes amanece un nuevo día, hermoso, con los típicos vapores surfeando sobre la lámina de agua, el puente al fondo y las figuras recortadas por el sol que comienza a emerger entre los árboles. La vida tiene a bien hurgar en la familia transmoruchera, cachis en la pera, lo que nos obliga, muy a nuestro pesar, continuar con la ruta mermados y un poco más tarde de lo habitual, buscando la estación abandonada de Villares, las fincas de toros bravos, el bar de La Morena en Sepulcro Hilario y una buena variedad de maravillosos paisajes, además de las interminables pistas del Campo Charro que nos dejan en Tamames... El Cabaco, nuestra puerta a la Sierra de Francia, nos recibe con su merendero y el hierro obra del Jariego preparado para marcar a la cabaña transmoruchera, ¡qué puntazo!


A partir de aquí el grupo sigue ampliándose y, ya con nuevas incorporaciones, hacemos inmersión en la sierra, con los desniveles más serios y el regalo de los paisajes espectaculares del Parque Natural Las Batuecas-Sierra de Francia. 


Algunos ya lo sabíamos, pero este año el Lera nos pone aún más de manifiesto, o nos descubre, la excelsa capacidad y maña que el Jariego tiene como mecánico. Capaz de convertir la rueda en un ocho (ayudado por una piedra más grande que una sandía) y volver a dejarla funcional con una simple llave de radios y la ayuda de un árbol. ¡Increíble! Somos testigos de que la rueda era el típico ejemplo de «esta rueda se tira a la chatarra, directamente». ¡No contaban con la perseverancia del Jariego!


En el pueblo serrano de La Alberca recibimos a más compañeros, ¡vaya rebaño!, y nos encaminamos hacia el sendero GR-10 que nos acerca a Herguijuela de la Sierra, en un espectacular descenso de unos 17 kilómetros que finalmente nos aparca junto al río Alagón, próximo a Sotoserrano, nuestro tradicional estacionamiento para tomar un reconfortante baño, atender a la burra, llenar estómagos, contar chascarrillos, compartir vivencias, vivaquear... ¡Y aquí también recibimos a nuevos transmoruchos! ¡Vaya manada!



¡Canta el gallo en El Arenal! Desayuno y revisión de mecánica; aquí siempre tenemos alguna sorpresa que madruga más que nosotros y nos desconcierta con algún tema de frenos, radios, pinchazos, trasportines... ¡Y este año no fue distinto! Ya no nos quedan faltriqueras donde buscar repuestos, je, je...



¡La cabaña transmoruchera se pone en marcha! y con ganas, y un poco de retraso, vamos a por la etapa reina, con esos desniveles positivos que nos esperan, de esos que dan la risa.
Este día es impresionante, por un lado, los pinares y la vegetación de ribera, con el Alagón recibiendo al Cuerpo de Hombre a puerta gayola, los olivares soleados mirando al mediodía, los bosques de robles regalando su frescor, los pueblos serranos y sus encantadoras gentes, el chuletón de Fuentebuena, las gigantes y pétreas laderas de la Sierra de Béjar... Por otro lado, un sin fin de variedades de caminos: senderos empinados y estrechos, callejas cubiertas de vegetación y piedras con esa identidad transmoruchera, ascensos y descensos imposibles (o no), y sobre todo, durante bastantes tramos, caminos inundados para subir al Alto de la Hoya y en su descenso hasta rematar en Puente Congosto. ¡Vaya desnivel, Maribel!



De nuevo un río, el Tormes, nos acoge para pernoctar, y para no faltar a lo que viene ocurriendo estos días, ¡el buen rollo y el seguir sumando transmoruchos al grupo! ¡Vamos!



De nuevo el gallo nos despierta temprano, que nos espera la cuarta y última etapa que nos tiene que dejar en Peñaranda, atravesando buenos caminos, incluso la Cañada Real Occidental Soriana que transcurre por páramos altos y poco poblados. Son caminos conocidos por los que practicamos habitualmente BTT en nuestra zona, y a ellos, y a nosotros, se suma un viento bravo que no había sido invitado. ¡Será...! ¡Menos mal que venimos sobrados...!



En breve estamos apretando radios en San Miguel de Serrezuela y bajamos disfrutando por la zona de los Baños de Somosancho para llegar a Alaraz, donde nos recibe la familia de Rosa y Pedro, como todos los años, con un almuerzo que no nos merecemos. O sí...
Y de aquí a Malpartida, para bautizar a los nuevos transmoruchos en el río Margañán y preparar, con amigos y familiares, la última tanda de transmoruchos a marcar y compartir unas empanadas, caldos y viandas variadas... Alguno incluso aprovechó para disfrutar de una siesta tendido al sol antes de rematar la jugada por las largas pistas que definitivamente nos dejan en Peñaranda de Bracamonte. Aquí, en la plaza, junto al Templete, familiares y amigos nos acogen con calor y vítores dorados que encienden el ánimo.
Foto de familia y a pensar en la Transmorucha 2014.
¡Vaya gozada, transmoruchos!



Aprovecho este modesto espacio para dar las gracias a todos los individuos, animales o cosas que algo han tenido que ver con la Transmorucha. Desde los familiares y amigos que nos han aguantado el antes, durante y después, pasando por los padres de la criatura, los casi sesenta participantes (algunos privilegiados con sus hijos dando pedales), los amigos como Paco y el resto de conductores sufridores que nos han trasladado hasta los diferentes puntos de partida, los que nos han atendido con las averías, los que desde la ruta o desde casa se han encargado de las redes sociales, los que como Juan Machine, Salva o Gabi han estado de guardia, los que nos han dado conversación en unos u otros municipios, los bares de las localidades visitadas que ya nos tratan como si fuéramos del pueblo, la familia de Pedro y Rosa que nos preparan un almuerzo de morirse en Alaraz, los que nos fueron a recibir al Templete, y rematando la jugada, al apoyo de la FDMESCYL (Federación de Deportes de Montaña, Escalada y Senderismo de Castilla y León). Y otra vez, sin ánimo de ser pesados y sí porque se lo merecen, a esposas, esposos, novias, novios, hijas e hijos.



Aquí tenéis mis fotos (etapa 1, etapa 2, etapa 3, etapa 4), las de Miguel Manjón, las de El mi Juli, las de Julián Andrés, Cris (San Juan BTT), Ángel Dj, Rafa...



Track de la primera etapa: Aldeadávila de la Ribera-Villares de Yeltes


Track de la segunda etapa: Villares de Yeltes-El Arenal (Sotoserrano)


Track de la tercera etapa: El Arenal (Sotoserrano)-Puente del Congosto


Track de la cuarta etapa: Puente del Congosto-Peñaranda de Bracamonte

 




Y ya iremos subiendo, poco a poco, algún vídeo...
  - 4ª etapa, vídeo BTT San Juan, parte 1.
  - 4ª etapa, vídeo BTT San Juan, parte 2.
  - 4ª etapa, vídeo BTT San Juan, parte 3.


¡Yo estuve en la Transmorucha 2013!, ¡fantástico!


Entrevista en Radio COPE Peñaranda, con Miguel Navarro @mnavarroruano (a partir de 6´50")

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